En la red CENTURY 21 España creemos firmemente que las tecnologías de la cuarta revolución industrial han llegado para ayudar a nuestros asesores inmobiliarios a realizar unas mejores ventas de viviendas y promociones. En este afán de dotarlos del conocimiento de las últimas tecnologías aplicadas al marketing inmobiliarios, en el artículo de hoy vamos a focalizarnos en cómo los drones ayudan a vender una vivienda.
Antes de meternos de lleno en todas las posibilidades de los drones aplicados a los procesos de marketing y ventas inmobiliarias, veamos qué es un dron. El vehículo aéreo no tripulado (dron), no es sino una aeronave que vuela sin necesidad de un piloto en su interior, si bien sí se requiere de un profesional cualificado para su control desde el exterior.
El dron es capaz de mantenerse en vuelo mediante la propulsión que le otorga su motor (ya sea este de explosión, eléctrico o de reacción). En todo caso, la persona encarga de su manipulación debe disponer de los permisos y certificaciones oficiales correspondientes para asegurarnos de que el vuelo se realiza bajo el amparo de la ley.
La aparición de estos pequeños «intrusos» en el panorama tecnológico ha revolucionado la captura de imágenes aéreas. La asociación es inmediata: tenemos a nuestra disposición una tecnología que puede alcanzar la altura de vuelo de un pájaro, por lo tanto, si le añadimos una cámara, podremos obtener imágenes impactantes. Dicho y hecho.
Aquí reside el principal potencial del uso de drones en el marketing inmobiliario. En la red CENTURY 21 sabemos que hay que dar una vuelta de tuerca al marketing inmobiliario, adaptarnos a las tecnologías. Por ello, creemos en el futuro de estas aeronaves no tripuladas en nuestro sector.
¿Qué aporta el dron a la captación y venta inmobiliaria?
En primer lugar, lo más inmediato: si bien hasta su aparición la única forma de obtener una mirada diferente sobre nuestras viviendas y promociones en venta pasaba por contratar un helicóptero o avioneta, la irrupción de los drones abren nuevas formas de captar el potencial de cualquier nueva promoción mediante una inversión rentable a medio plazo.
Junto a ello, el segundo hito que debemos considerar: mejorar la calidad de las imágenes aéreas que se muestran de una vivienda. Y es que en la actualidad, los drones de gamas medias y altas ya montan en sus estructuras cámaras de alta resolución. Con estas, podemos ofrecer a nuestros potenciales clientes fotografías con una nitidez extraordinarias, vídeos completos o visualizaciones personalizadas de las propiedades en venta.
Precisamente aquí, en este elemento diferenciador, queremos insistir desde la red Century 21. Aportar una óptica nueva, más inmersiva, más cercana al potencial comprador, y dotar de estos servicios a la otra parte (el vendedor) supone una ventaja competitiva diferencial. En una sociedad donde cada vez prima lo visual, ofrecer un ángulo diferente supone una ventaja
Sabemos que las fotografías, a pesar de los consejos que transmitimos a nuestros asesores y franquiciados, no siempre son fáciles de conseguir. De ahí nuestro empeño de dotaros de todos los recursos posibles. Así, mediante el uso de drones, podremos explorar nuevos encuadres, nuevos puntos de mira para acercar al comprador a la vivienda de sus sueños.
Hemos insistido en artículos anteriores sobre el potencial de atracción de una buena imagen, sobre todo en estos tiempos en los que los clientes se ven bombardeados en muchas ocasiones con miles de propuestas similares. La imagen, la buena imagen, es la primera entrada en juego de nuestra acción como asesores inmobiliarios.
A día de hoy, los drones nos abren una puerta a mostrar la vivienda en venta no solo desde una óptica nueva, más personal y empática, sino incluso en diferentes momentos, con diferentes luces. Incluso en ausencia de luz, en la noche.
La utilización de drones es una oportunidad para un marketing inmobiliario que sabe adaptarse a las sociedades cambiantes y la revolución tecnológica, como el que aplicamos en la red CENTURY 21 España.